Translate

sábado, 17 de agosto de 2013

Sukhotai una visita bajo agua

Después de nuestra primer día de toma de contacto en Bangkok, Rosa y yo nos dirigimos el día 8 de agosto a la terminal de Moh Chit para coger el autobús a Sukhotai. Un viaje que nos habían vendido de 6h pero que al final fueron 8h.


Llegamos a la parada de autobuses Sukhotai sobre las cinco y media. Desde allí hasta nuestra guest house compartimos un taxi con una pareja francesa que venía en nuestro mismo autobús. La ciudad  nueva de Sukhotai está a 12 km de las ruinas y no tiene ningún aliciente especial aparte de ser un sitio tranquilo donde poder liberar algo de estrés de Bangkok paseando por sus calles y cenando en sus puestos callejeros ricos o en el mercado central.




El día siguiente amaneció soleado y, tras un excelente desayuno en nuestra guest house, cogimos el saewat que sale del centro de la nueva Sukhotai en dirección a las ruinas. Una vez allí decidimos alquilar unas bicis por sesenta baths en una de las tiendas cercanas a la taquilla y divertirnos visitando las ruinas.














La verdad es que el complejo es más bonito de lo que me esperaba. Considerado el primer reino tailandés independiente, Sukhotai emergió cuando el imperio jemer estaba de capa caída, en el s.XIII, y gobernó tramos de su frontera occidental durante ciento cincuenta años. 













Las ruinas se distribuyen en tres zonas donde tienes que pagar 100 baths por la entrada y 10 por la bici. Nosotros alquilamos las nuestras en una tienda que había enfrente de la donde te deja el Saewat y, en el momento en que compramos los tickets para entrar en la primera zona, la más cercana a la parada de autobuses, el cielo se cubrió de nubes negras cubrieron el cielo y haciendo que nos tuviéramos que refugiar cada dos por tres por las fuertes lluvias que descargaban. No obstante las ruinas ganaban en personalidad y colorido gracias a la suave luz que se filtraba a través de las nubes.














Pasamos gran parte del día disfrutando del maravilloso complejo hasta que decidimos que tanta lluvia nos iba a hacer encoger, y volvimos a coger el autobús de vuelta a la nueva Sukhotai donde paseamos por la pequeña ciudad, nos acercarnos a cenar a la zona del mercado y por último tomar una cervecita en un bar cercano a nuestra guest house para planear nuestro siguiente paso, la ciudad de Chiang Mai pero eso será parte de mi siguiente post.

No hay comentarios:

Publicar un comentario